La llevada y la traída, el segundo documental de Ofelia Medina, da seguimiento a la ceremonia que se le hace a la Virgen de Zapopan, en Jalisco, conocida también como la patrona universal de la diócesis de Guadalajara. En este evento, una réplica de esta imagen llamada La virgen peregrina, sale cada año para peregrinar nueve kilómetros por las iglesias de Guadalajara. Este andar anual, donde se estima la visita de dos millones de personas, comienza el 20 de mayo y termina el 9 de octubre de cada año, cuando hace su arribo final a la catedral metropolitana, donde es reemplazada por la original con la cual se hace otro breve recorrido. La llevada y la traída fue seleccionado como finalistas del premio Hecho en Jalisco en el Festival Internacional de Cine de Guadalajara.